Es una imagen, textura o diseño que puede repetirse las veces que se desee sin que haya juntas o rupturas evidentes. Todos los lados de la imagen o diseño deben coincidir perfectamente.
Se puede escoger una imagen o diseño de la colección Altro, o seleccionar una de una biblioteca o imágenes. Al seleccionar la imagen, asegúrese de elegir una que permite su disposición con un diseño continuo.
Si decide utilizar una fotografía propia, asegúrese de que está derecha. La imagen no puede estar girada ni rotadas ya que no serviría.
Una vez elegida la imagen, ábrala con un programa de edición como, por ejemplo, Adobe Photoshop. Seleccione una zona que será el diseño que se repetirá y métala en un cuadrado; así, se organizará correctamente el mosaico y se creará una imagen continua.
Aumente el tamaño del encuadre para tener el espacio necesario para duplicar la imagen. Copie la primera capa que se haya creado y muévala/desplácela al cuadrado original, fusionándolos.
Una vez hecho, podrá comprobar si tiene alguna transición abrupta o si se ve alguna junta.
De ser así, use la herramienta de clonación con dureza y opacidad bajas para eliminarlas.
Elimine la capa superior incorrecta y vuelva a intentarlo, después de la clonación, hasta que la imagen quede a su gusto. Repita el proceso con los otros tres lados del recorte original.
Al recortar la imagen, tenga en cuenta qué elementos que llaman su atención se duplican ya que crearán un patrón o diseño claro en la pared.
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